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Uno de los innumerables ataques fuentecanteños sobre la meta del Deportivo Pacense.
El Fuente de Cantos afronta en la zona templada el tramo más complejo de la competición
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El Fuente de Cantos afronta en la zona templada el tramo más complejo de la competición

En las próximas jornadas recibe en el Municipal Zurbarán a Jerez y Extremadura y viaja a Don Benito

Juan Carlos Zambrano

Miércoles, 27 de enero 2016, 19:46

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Durísimo calendario el que espera en las próximas jornadas a los de Fael, ya que se las tendrán con tres de los seis primeros clasificados. La primera cita es el Municipal Zurbarán, recibiendo nada menos que al líder Jerez, aupado merced a su sólido juego, ya que apenas encaja goles. Para celebrar el Carnaval, los verdes se desplazan a Don Benito, un equipo potente pero bastante irregular. Cierra este complicado mes la visita del Extremadura, aspirante a todo, al Zurbarán.

Pero mientras tanto, los fuentecanteños, por si acaso, han acumulado reservas. Así, en las últimas cinco jornadas han cosechado dos victorias, dos empates y una derrota, y se sitúan duodécimos a 12 puntos de la zona de peligro.

Tras la agónica victoria ante el Pueblonuevo, los de Fael cerraban primera ronda con la visita al Coria, un grande que parece venido a menos este año. Comenzaron ganando los fuentecanteños, y se permitieron incluso fallar un penalti, pero en la segunda mitad los caurienses dieron la vuelta al marcador. Al filo del reglamentario, un providencial Carlos hacía el empate.

De nuevo jugaba tras el descanso navideño el Fuente de Cantos lejos de su feudo. Partido trascendental ante el Olivenza, rival directo. Mal empezaron las cosas para los verdes que en el minuto 3 ya perdían. La mala suerte se cebó con el central Nevado, que calculó mal el vuelo de un balón arrastrado por el fuerte viento, y dejó el cuero franco a un delantero. Después de eso, enmendaría su error marcándose un gran partido. A partir de este tempranero gol, el juego, las ocasiones y el dominio correspondieron a los verdes, que en seis minutos de la segunda mitad, gracias a un golazo de Toy y a un penalti (esta vez sí, transformado) sobre Toboso, dieron la vuelta al marcador.

Volvía a jugar en el Zurbarán el Fuente de Cantos tras casi un mes de ausencia. Y lo hacía ante un rival, el Deportivo Pacense, muy reforzado, y con una racha incluso mejor que la de los de Fael.

Si el fútbol se midiera a los puntos, la victoria de los fuentecanteños habría sido inapelable. En una primera parte primorosa, los verdes dispusieron de hasta siete ocasiones claras de gol. Pero unas veces los palos (con lanzamientos de Cristian, José Ramón y Mendo repelidos por la madera), otras el buen hacer del meta visitante, que sacó dos balones de mucho mérito, uno a José Ramón, y otro a Mendo tras un libre indirecto dentro del área, y otras la falta de puntería, como en el remate del menor de los Toboso a bocajarro que se fue junto al palo, impidieron que los verdes marchasen al descanso con una renta muy holgada.

Solo Quintana, tras un magistral saque de falta de Mendo, pudo, peinando hacia atrás el balón, batir la meta que parecía maldita.

Inexplicablemente, en el segundo tiempo el Fuente de Cantos pareció otro. Cedió la iniciativa al Deportivo y se metió en su campo. De nada le sirvió a Fael desgañitarse pidiendo a sus jugadores que adelantasen líneas. Con todo, los verdes tuvieron dos claras, una que sacó un defensor bajo palos y otra un tiro de Tomé que el meta desvió junto a la base del palo.

Pero, claro, cuando juegas tan cerca de tu meta, el peligro es una constante: en el descuento, un centro en apariencia sin mucho riesgo, era cabeceado por el central pacense, que hacía el empate.

Después tocaba la difícil visita a Azuaga, uno de los conjuntos más sólidos en casa. En el primer tiempo ambos equipos dispusieron de ocasiones, pero no consiguieron gol. No llegaría el primer tanto para los locales hasta la segunda mitad. De nuevo el juego se equilibró, pero sería el Azuaga de nuevo quien marcase merced a un penalti. Con los verdes en busca de acortar distancias, los locales sentenciaron. Ya casi al final, el mayor de los Toboso pondría el definitivo 3-1.

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