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Una imagen de la romería de San Isidro de Fuente de Cantos./
San Isidro, fraternidad y alegría

San Isidro, fraternidad y alegría

Fuente de Cantos celebra su fiesta grande, un espacio de encuentro que este año conmemora que la talla del Santo se compró hace un siglo

hoy fuente de cantos

Martes, 15 de mayo 2018, 08:27

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La pradera Martá volverá a ser hoy una fiesta. No una cualquiera, sino la que corresponde al día grande de la Romería de San Isidro de Fuente de Cantos, así en mayúsculas, que de una manera u otra lleva celebrándose desde finales del siglo XIX y que su atractivo devoto, festivo y convivencial en toda la comarca de Tentudía y en los pueblos próximos de Sevilla y Huelva han hecho que, desde 1993, lleve el título de Fiesta de Interés Turístico Regional.

Para los amantes de las efemérides este año, además, se celebra una notable y redonda: se cumple justamente un siglo de la adquisición, por un precio de mil pesetas aportados por los agricultores y ganaderos fuentecanteños, cada uno según sus posibilidades, de la talla del Santo que preside la ermita. Esta talla del Labrador erguido sustituyó a la anterior, que desapareció en circunstancias nunca aclaradas, y que era un tributo a la ortodoxa imaginería sobre el Patrón de los campos, pues representaba un san Isidro rezando arrodillado mientras una pareja de bueyes guiados por un ángel araban el campo.

Pero no es solo la historia lo que hace grande a la Romería de San Isidro de Fuente de Cantos, sino su capacidad para hacer que en torno a ella se exprese lo mejor de sus vecinos. Lo dice el presidente de la Hermandad de San Isidro, organizadora de los actos en honor al Patrón, Luis José Rubio, quien, cuando se le pregunta cuál es el secreto para que esta celebración sea tan querida por los fuentecanteños, señala sin dudarlo: «el verdadero milagro de San Isidro es que esta romería marca un territorio de armonía. Gente que ni se relaciona durante el resto del año, encuentra en esta fiesta el momento de hablar, de bailar, de cantar junta. Es como si el Santo creara un terreno neutral en el que es fácil llegar a la fraternidad».

Aromas andaluces

San Isidro es, además, el territorio en el que encuentra su mejor expresión la parte andaluza del alma mestiza y acogedora de Fuente de Cantos. Si la fiesta de La Chanfaina es un homenaje a Extremadura, a sus tradiciones gastronómicas y culturales, una manifestación de compromiso con su tierra extremeña, la romería está llena de aromas andaluces sin que nada por eso desentone: el Camino, los cantes flamencos, la estampa imponente del caballo y el jinete, las carrozas, la fiesta durante días sin descanso y sin horarios en sus 186 casetas... son costumbres que arrastran referencias de la región hermana, y que seguramente como nadie encarna hoy el diseñador local Luis Fernández, que desde Fuente de Cantos y precisamente con la romería como su reconocida primera fuente de inspiración, ha entrado como un huracán en el mundo de la moda flamenca logrando ser reconocido como un renovador de la tradición.

Pero la romería de Fuente de Cantos es devoción por san Isidro. Devoción desde la traída del Santo desde su Ermita hasta la parroquia de Nuestra Señor de la Granada, a primeros de mayo; devoción en el triduo y en el Camino de vuelta a la Ermita el pasado día 5. Este año, además, «ha sido un Camino maravilloso. Más de 6.000 personas y 120 carros haciendo los 14 kilómetros, todo el mundo mostrando su fervor por San Isidro», señala Luis José Rubio.

Una devoción que llegará a su máxima expresión hoy cuando, a las 12.30 horas, se celebre en la Ermita la Misa en honor al Labrador, cantada por el Coro de la Hermandad. Al finalizar, todos realizarán su ofrenda floral al Santo, recorrerán la pradera en procesión y la fiesta se extenderá por ella sin descanso, en fraternidad y alegría.

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