La UD Fuente de Cantos tiene seis oportunidades para certificar la permanencia

Seis partidos quedan para terminar la competición y la UD Fuente de Cantos puede decirse que está virtualmente salvada del descenso directo. Ahora mismo, con 18 puntos en liza, los fuentecanteños están 9 puntos por encima de las plazas que marcan bajar a Preferente.

El partido del domingo pasado ante el Arroyo no solo ha supuesto una inyección de moral tras el varapalo de Badajoz, al empatar contra un grande y tras realizar un buen encuentro, sino que además ha llevado a los verdes a los 33 puntos, que fue la frontera de la permanencia el pasado año.

Pero aún pueden darse situaciones que compliquen la existencia a los de Fael. La peor de las posibles es que descendiesen Cacereño y Villanovense y no ascendiese ningún equipo extremeño a Segunda B. Ahí entrarían en liza, por la situación actual, Valdelacalzada y Amanecer. El principal problema son los de Sierra de Fuentes, que si bien están a 7 puntos, tienen el gol average ganado a los fuentecanteños.

Por tanto, para sellar la permanencia sin sobresaltos la UD Fuente de Cantos debería lograr entre 3 y 5 puntos más, lo que parece asequible a la vista del calendario que resta.

El próximo partido es ante el Sanvicenteño. Este equipo marcha último, pero ha conseguido en casa 19 de los 24 puntos que tiene en la tabla. Se está jugando sus últimos cartuchos así que no será un rival fácil.

Tras este compromiso, los verdes jugarán tres encuentros en casa ante Díter, Calamonte y Coria, equipos que ni optan a liguilla de ascenso ni tampoco tienen problemas para la permanencia. Lo mismo puede decirse de los dos conjuntos a los que el Fuente de Cantos se medirá a domicilio, Atlético San José y Pueblonuevo, ambos en zona cómoda y con sus deberes hechos.

Lo de jugar contra equipos que ya están a salvo de sobresaltos es un arma de doble filo, y bien lo saben los fuentecanteños tras lo sucedido hace dos temporadas, cuando se lo jugaban todo a una carta en el Zurbarán ante un Jerez ya sin nada que disputar y cayeron por 1-3. En esa ocasión, solo un milagro, la victoria in extremis del Arroyo en Segunda B unida al castigo por el chalaneo entre La Roda y Algeciras, salvó a los verdes, al no descender ningún extremeño de la categoría de bronce.