Verónica Bueno se alza con el XXII Premio Internacional de Pintura Zurbarán

La artista pacense afincada en Socuéllamos (Ciudad Real) Verónica Bueno Salgado, se ha alzado con el premio internacional de pintura Francisco de Zurbarán en su XXII edición. Su obra, junto a las otras 21 finalistas están expuesta en el Museo Zurbarán, en la antigua Casa de Correos.

El cuadro presentado por la artista pacense, titulado Silencio, el mundo se derrumba, abunda en la temática de esta pintora, que utiliza su obra como modo de denuncia social. Verónica Bueno recibirá los 5.000 euros con que está dotado el premio, puesto que en esta edición, y como novedad, no se dividió la cuantía total entre tres ganadores, sino que se asignó un único galardón.

Al certamen se han presentado un total de 40 obras de muy diversos puntos.

Además del premio absoluto, el jurado decidió otorgar tres accésit sin dotación económica. Las obras reconocidas fueron Lázaro, o allá en el mediodía, del fuentecanteño Jorge Amaya, Andrea, de la granadina Leonor Solans, y Retrato N 8 Antonio Serie serendipias, de Francisco Abel Vellarino, de Oliva de la Frontera.

La artista ganadora nació hace 32 años en Badajoz, es licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla, y pese a su juventud ya ha obtenido numerosos galardones, como como el Indalencio Hernández, de Valencia de Alcántara, el Timoteo Pérez Rubio, de Oliva de la Frontera, el Calamonte Joven o el Paco Merino, de Granollers.

Hace dos años ya concurrió al premio Zurbarán, quedando en segundo lugar. Además, ha realizado exposiciones México, Granada, Cáceres, Badajoz, Ciudad Real, Málaga, Jaén o Córdoba, entre otros lugares. Su obra está marcada por el impulso de poner el foco sobre las situaciones más duras para obligarnos a reflexionar sobre ellas, en unos tiempos en que las imágenes sobre el sufrimiento se repiten en televisión hasta llegar a inmunizarnos.