La Diputación conmemora el centenario de la muerte de Nicolás Mejía

Hace cien años fallecía en Madrid Nicolás Mejía, pintor nacido en Fuente de Cantos en 1845, y que se formó en Madrid, París y Roma. Con motivo de esta efemérides, la Diputación de Badajoz, institución a la que el artista fuentecanteño estuvo muy vinculado, ya que le becó para estudiar en Roma y París, ya ha celebrado una actividad muy peculiar que unió pintura, danza, música y teatro. Se trató del espectáculo Vida de un Cuadro, en el que la obra de Megía, Laboremous o El estudiante de Salamanca, inspirada en el poema dramático-narrativo del mismo nombre original del almendralejense José de Espronceda, sirvió para teatralizar la pintura y crear Pícaros con fortuna en el que, por arte de la magia teatral, los espectadores han podido ver al mismísimo estudiante de Espronceda en persona dando vida al cuadro del pintor de Fuente de Cantos.

Laboremus es quizá el cuadro más conocido del artista (pertenece al Museo del Prado) y forma parte de una amplia obra donde mezcló distintas temáticas y técnicas, aunque Mejía destacó sobre todo como acuarelista.

Según se indicó desde la Diputación, este acto pretende reivindicar la memoria del pintor, sin perder la ocasión en esta fecha, como ya ocurriese en 1995 cuando un intento de conmemorar el 150 aniversario de su nacimiento se frustró por falta de apoyos.

La teatralización de este cuadro resultó todo un éxito. Una espectacular y muy cuiddada puesta en escena en el recinto del Museo de Bellas Artes, perteneciente a la institución provincial, hizo las delicias del público que acudió a contemplar esta forma distinta de acercarse al arte.

También el ayuntamiento fuentecanteño ha anunciado que realizará actos para celebrar la efemérides, aunque por el momento no hay programa cerrado y no se sabe nada de las actividades que se tiene pensado llevar a cabo, ni cuando empezarían los actos de celebración.